...Puede besar a la novia.

Será el hecho de que nuestra generación (la de mi medio) ha tenido que asumir roles más maduros a su corta edad, trabajar, estudiar, auto sustentarse y también ayudar en la casa lo que ha calado en la necesidad de independencia a tan temprana edad (ninguno llega a los ‘ta), ellos pasados los mid-20 y ellas algunas aún más jóvenes pero profesionales, al menos lo serán antes de dar el “Sí”.
Será la presión de ellas de que ya a los 22 siente el temor de que quedar jamonas si no ven boda a corto plazo.
Algún ‘accidente’, no es sus casos afortunadamente pues todas están programadas para mediados-fin de año, además el año pasado pasamos por 2 cercanos y fue lección aprendida, pero si fuese el caso, bienvenid@ sea!.
Siempre he creído que para emprender este camino se debe crear una base, tanto emocional como económica, para que se puedan sobre llevar mejor las adversidades que puedan venir con el casamiento y si se hace muy temprano probablemente no se cuente con la madurez para echarlo hacia delante.
El matrimonio es el compromiso de crecer como pareja, como personas, llevando como meta fija el formar una familia y cuyo objetivo es el de vivir felices y realizados, enfrentar los obstáculos de frente pero unidos, así como las alegrías, el de compartir experiencia y crecer como un núcleo.
La razón del post no es cuestionar sus motivos, pues son claros, amor y la necesidad mutua de llevarlo al nivel superior, soy partidario de los matrimonios jóvenes pero con ‘zapata’, creo que se debe disfrutar de los hijos, nietos y porque no, también de los biznietos.
A los 10, felicidades en el venidero curso de sus vidas!, y a los demás esperen el año que viene pues se me acabaron las cuotas de regalos.